Han pasado siete días desde que desaparecí, si una semana y nadie se inmutado en lo mas mínimo. ¡Valla!. La profecía se hizo realidad justo y exactamente como la predije.
¿Dónde estás?
- Gracias por jamás estar cuando por primera vez en mi vida a gritos lo supliqué.
¿Dónde estoy?
- ¿Acaso importa ahora?.
¿Cómo estás?
- No te ha importado en siete días y te importa justo ahora.
¿Dónde estás, responde?
- Ya no creo que importe.
¿Dónde estás, dime por favor?
- Qué vas a hacer si lo sabes, no puedes hacer nada.
*Si alguien lee esto, no importa, ya nada importa. Déjenme en paz, quiero ser libre.*
*Y si tu lees esto, recuérdame siempre como la parte mala de tu alma.*
1 comentario:
:( se te extraña. Puedes reaparecer maldita sea! jajajaja mentira, espero que estés bien!
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