martes, 31 de agosto de 2010

31/08/10 Adiós agosto.

Despidiendo el mes, que tanta satisfacción me trajo.
Desde el primer domingo cuando elevamos velas oscuras al cielo pidiendo lluvia y fertilidad...
En la luna nueva del diez, cantando al universo sin voz, sin amor, sin penas, sin tristezas, esperando con calma a que cruce una estrella e invocar al cielo perdón. Testigo de este acto sin temor te concedo a ti mi bendición, mi energía y mi corazón.



El 24 de luna llena a medianoche, un halcón despertó exaltado y agresivo, en su penumbra me quedé inmóvil para observarlo.

No puedo recordar lo q paso despues, miles de aves se apoderon del cielo y lo cubrieron hasta volverse gris. Entre la brisa y el dolor de aquella magnifica y perturbadora visión logré notar una silueta semejandoze a la de una mujer. Su cabellera se extendia en el viento cual ave volando sobre ella, sus manoz se extendian en su delante para acariciar una ave tenebrosa. Alas que la hacian ver como un angel en pos de aceptación de ellas desplegaban numerosos halcones, el paisaje se torno clarooscuro.


 Y sín sensación ella quedó posada sobre el frió de aquella perfecta ilusión...

2 comentarios:

Anónimo dijo...

hOLA, ACABO DE LEER TUS POST ANTERIORES :)
me llamo mucho la atención este .
Gracias:)
sige compartiendo ideas con nosotros .

Eduardo Martín dijo...

A veces se espera, a veces se busca, pero nunca llegaremos a encontrar nuestra alma gemal u otra mitad, la separación viene con una maldición, la de jamás encontrar algo perfecto. Es esto cierto? o será que buscamos la parte perfecta la cual no existe... los 3 articulos que lei me gustaron... besos y abrazos mi estimada.

La tristeza en mi corazón es como un pozo eterno... podrás tirar una monera y jamás escucharla chocar contra el agua... puedo sentirme triste y me he cansado de llorar...

Aún tengo esperanza de salir de aquel circulo... y encontrar lo real de mi que nunca pude apreciar en ella...

Edubell