jueves, 13 de diciembre de 2012

Encuentro de un Amor Lejano



Desperté llena de sudor, con los ojos hinchados y los párpado caídos, no se cuanto tiempo estuve llorando, camine aun sonámbula y con las bata de hace dos días atrás ¿Qué día es hoy? Me pregunté.

Mi noción del tiempo se perdió cuando el se marcho. Dirigiéndome hacia el baño, sentí un fuerte hincón en el estomago y un ligero mareo, no le dí importancia y seguí; parada justo frente al espejo, era una zombie con los ojos rojos, la piel muerta y los labios entumecidos, el mal sabor de boca hacia que quisiese vomitar, dejé correr el agua, agregue jabón y me recosté en la bañera tratando de que otra vez el mundo se detuviera y fuera yo la única en este planeta; malditos incones empezaron a dormitarme lentamente la espalda, el techo era neutral, pero la habitación empezaba a girar a mi alrededor, cerré los ojos y al fin pude calmarme, me quede dormida; minutos después desperté en mi cama, era ilógico tratar de comprender esto, no me hice pregunta alguna y solo me limite a abrazar mi almohada con tanto fervor, recobré el aliento, extrañamente un olor llamo mi atención, era tocino, el aroma a café recién pasado me obligo a levantarme, el olor se hacia cada vez mas perceptible.

¿Quién eres? pregunte con el corazón saliéndose de mi pecho.
El volteo sutilmente y me esbozo una cálida sonrisa.
-          No tengas miedo, toma asiento.

En la mesa había un desayuno digno de una princesa, tocino, huevos revueltos, jugo y frutas de estación, accedí a su petición sin poner resistencia, devore cada bocado como si fuese el ultimo, él se acerco y delicadamente agrego agua hirviente y dejo  caer hermosas gotas de café mientras yo me perdía en el vaivén de emociones ocasionadas por esté mi mas grande adicción, tome un sorbo quemándome la lengua, me levanté y me acerque a él, lo abrasé por la cintura y empecé a besarle la espalda, el cuello; me voltee cara a cara hacia él, pase mis manos sobre su cabello, acaricie su rostro simétrico, su largo cuello, empecé a sentir un ligero cosquilleo en la pelvis, de un tirón le quite  el pantalón, mis manos desesperadas y nerviosas se deslizaron sutilmente, agarre su trasero y le quite con los sientes el boxer que llevaba, estaba arrodillada ante él, empecé a acariciarlo, él cogió mi cabello y  tiro de él, Ahhh grito mientras empezaba a meter mi boca en la fiera, lo lamia, cual paleta de helado a punto de derretirse, el gimió en un grito ahogado, el punto de excitación llego a su limite, apretaba sus ojos y sus puños con demasiada dureza, seguíamos parados en la cocina, nos miramos fijamente como si habláramos el mismo idioma con la mirada, fuimos a mi habitación que estaba hecha un desastre, pero eso no importaba ahora, me tiro en la cama y empezamos a besarnos como si no hubiese un mañana, besos largos llenos de pasión, él me quito rápidamente la bata que aún llevaba puesta, empezó a acariciarme los pechos como si los conociera de toda la vida, imaginé que  tenia experiencia, así que solo me deje llevar, los besaba, los lamia, seguía acariciándome y besándome al mismo tiempo tenia una mano sujeta a mi cuello, cada vez que tenia todo su fuego contenido tiraba de él, descendió al punto máximo de quiebre, llegue al primer orgasmo junto a él, no respirábamos, ni teníamos descanso, el estaba encima mío y no sentía asfixia, el placer que se apodero de mi ser me hizo ver estrellas, volaba mientras el estaba a mi lado, ambos volábamos en un cielo rojo grisáceo desconocido, ninguno estaba dispuesto a ser el primero en caer, todo estaba fuera de control en la habitación, pasaron apenas unos minutos y retomamos el acto sexual empezando con palabras; cariño, dulzura, el me acariciaba y al mismo tiempo entonaba palabritas que me hacían delirar,  me aferré a él con temor a que esto terminase, con sus miradas me decía que todo iba a estar bien, que lo que había pasado había sido muy bonito y puro..

Sé levantó recogió su ropa y se marchó, desde aquel día no nos hemos vuelto a ver, las caricias y aquellos susurros perdurarán en mi mente hasta nuestro próximo encuentro en donde esto ya no sea un sueño, sea realidad.





1 comentario:

Unknown dijo...

Muy buena historia, contada de una forma sutil y realmente placentera. Lo disfrute. Sigue así Lu.