Alguna vez hace mucho tiempo empecé a crear historias, en las que yo era la protagonista de un mundo imaginario al que anhelaba pertenecer, empecé a contarles estas historias a personas de mi alrededor, ellos decían wow, es increíble, y cosas que hacían ver que mi vida era un ejemplo para todos, que mis recuerdos aparentemente vividos eran cosas inimaginables, con el paso del tiempo, hasta llegue a creer en mis propias historias.
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Fue hasta cuando le conté a una compañera de clases, sobre los globos sujetados en la reja de mi casa, y exploto la bomba, sin mencionar la carta que le mostré que venían junto a esos globos. No es que lo hubiera imaginado, no, lo soné, y es que lo anhelaba de esa forma, perfecto y sutil, como un regalo envuelto con papel platino, brillante, brillante, tan brillante; resultó que todos en el aula leyeron la carta, no debería escribir sobre esto ni siquiera mencionarlo, pero que rayos, todos hacemos locuras para llamar la atención y ser aceptadas, (badlucklu), la verdad es que no soy el tipo de persona que desea ser aceptada, nunca lo he sido, nunca lo seré, tengo diferentes gustos a los demás, diferentes historias, creo en muchas cosas, veo cosas que la mayoría se niega a ver, me pierdo en mi misma, hablo conmigo, navego, me teletransporto, sueño, desaparezco y es lo mejor que sé hacer.
Empezaré contando una historia, en la que refleje quien soy, aunque muchos no lo comprendan y tampoco espero que lo comprendan, todos somos diferentes, soy incomprensible, nunca quise ser escuchada, pero ahora es tiempo de dar una vuelta leve en 180° y empezar a vivir mi historia, a cumplir mi historia, a hacer lo que realmente amo hacer y no hago por problemas "equis" a pudrirme en mi infierno, al que amo pertenecer.
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